Tras los dos encargos conseguidos en febrero con Egipto y a comienzos de abril con la India, Francia ha firmado con Catar un contrato de venta de 24 aviones de combate Rafale –fabricados por la empresa Dassault-.
Hasta este año, no se había conseguido exportar los Rafale a pesar de
varios intentos, según los expertos debido a su elevado coste.
El emir de Catar, el jeque Tamin bin Hamad Al Thani, había confirmado el pasado miércoles por teléfono al presidente de Francia, François Hollande, su intención de comprar 24 aviones de combate Rafale.
El contrato incluye la opción de compra de otros 12
aviones adicionales. También se han alcanzado acuerdos para la venta de
misiles de la compañía MBDA, así como para la formación
de 36 pilotos cataríes y cerca de cien técnicos.
La cantidad total a
pagar por Catar asciende a 6.300 millones de euros. Para firmarlo, el
propio Hollande ha realizado una visita oficial a la capital del
emirato, Doha.
"Es una buena elección", asegura
Hollande; "si estamos presentes aquí en Catar y en la región es porque
Francia es considerado como un país fiable en el que sus socios pueden
confiar". Las Fuerzas Armadas cataríes recibirán las primeras unidades a
mediados de 2018.
Este martes, Hollande está invitado a participar en la cumbre del Consejo de Cooperación del Golfo, que se celebra en Riad –Arabia Saudí-. Francia también se ha comprometido a colaborar en la organización de la Copa Mundial de Fútbol Qatar 2022.
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